PROPOSITOS LITERARIOS 2010

Cada comienzo de año pienso en que tengo que hacer una lista de los libros que voy leyendo, y al final siempre se queda en ese propósito fácil que no cumplo. Y es que leo muchos, y luego no me acuerdo de todos. Y me hago un cacao mental con cada personaje, historia y año en el que transcurre la acción, que mezclo títulos creando mis propios libros. Así que a la vista de que este año no tengo ningún viaje programado de esos que me cambien la vida, ni tengo propósitos nuevos a parte de "Diosito que me quede como estoy" (venga unos kilitos menos y un príncipe azul que me quiera), pues he pensado que el propósito es leer mucho y apuntarlo todo.

Esta es mi lista de libros que tengo en la mesilla en la espera de ser leídos:

• Sakamura, Corrales y los muertos rientes (Pablo Tusset). Voy por la mitad, así que para principio de año está terminado.


• Asesinos sin rostro (Henning Mankell) Recomendado por gente del trabajo. Es policíaco, y la verdad que después de la Trilogía Millenium, estoy un poco saturada.


• Últimas tardes con Teresa (Juan Marsé) Se me atraganta. Lo empiezo y lo dejo miles de veces.


• Modelos de mujer (Almudena Grandes) Me encanta esta escritora.


• Jueves Verbena (Mikel Zuluaga) panfleto vital, un alegato a la libertad, un canto contra la ignorancia y la exageración de los poderes. A ver si es verdad.


• Nora ez dakizun hori (Irati Jimenez) algo en euskera, que leo muy poco.


• 1984 (George Orwell) Un clásico que por fin tengo en mis manos.

Y ya que estoy, una lista de las series que quiero ver.

• Galactica. Ya voy por la segunda temporada. Me ha sorprendido que me haya gustado. No soy mucho de ciencia ficción si no es en dibujos, y esta serie me está gustando.


• Cómo conocí a vuestra madre. También voy por la segunda temporada. Cómo me he podido enterar de la existencia de esta serie tan tarde!!!


• Fama. Mi hermano me ha regalado la primera temporada, así que al tener a mi madre como a una fanática de la serie, la veré.


• Mad Men. Hablan muy bien de ella.


• Extras. Me la compré al verla muy barata. Tiene muy buena pinta.


• The Office. La tengo en la balda desde hace un año y todavía no me he puesto a verla en continúo. Y me gustaba.


• PainKillerJane. Mujer vengadora. Me gustó la premisa, y ahora que estoy aficionándome a Rocky y debo ver Jungla de Cristal, pues que mejor que ver a una mujer con superpoderes, que lucha contra terroristas.

Ya puedo empezar a leer y no separarme de la TV, porque el año va a ser largo.

HOROSCOPO

Hoy es uno de esos días en los que me siento idiota. Y no, no es por creer que me iba a hacer millonaria; sino por creer que el horóscopo iba a acertar por primera vez.
Esto era lo que me ponía:

Conocerá a alguien que puede llegar a ser su gran amor. Posible cambio de residencia, ¡ojo con los gastos! Aparecerán ciertas tensiones en su ámbito laboral. Caminar a diario mejorará su estado de salud y ánimo.

Las ciertas tensiones en el ámbito laboral han aparecido. En forma de bromas, pero con las que he terminado sufriendo un naranjazo y un cojinazo. Mobbing.
Lo de caminar a diario no sé si lo haré, pero la verdad que hoy he vuelto desde el trabajo andando. Necesitaba pensar y la música de fondo que llevaba me ha animado a mojarme bajo la lluvia. Pero llegando hacia casa ese ánimo se iba disminuyendo y la sensación de estupidez aparecía.
Y es que he estado pensando en la primera frase del horóscopo. "Conocerá a alguien que puede llegar a ser su gran amor". No lo he conocido, aunque siento que lo conozco. Puede que sea él. Yo lo sé, él no. Nunca me atreveré a decírselo, porque soy así. Tendré que soportar esa mirada, esas palabras, esos silencios... que me consumen por dentro.
También he pensado en el cambio de residencia. No es el momento, pero como bien escribía Rafa en su blog, me encantaría poder esconderme en una casita junto al mar, y escuchar la lluvia fuera mientras me abrigo con una manta y el sueño me vence.
No se ha cumplido. Pero no pierdo la esperanza es que se cumpla.

INDIANA JONES

Más vale tarde que nunca. Eso dicen ¿no?

Y eso me ha pasado con la saga de Indiana Jones. Por fin la he visto. Bueno las tres primeras, que de la cuarta no me han hablado muy bien (aunque terminaré viéndola).

Me miraron mal cuando dije que no las había visto. Y lo entiendo. Es extraño que alguien no haya visto Indiana Jones. ¡Es INDIANA JONES! Hasta yo flipo.

Pero cuando vi "Indiana Jones y el templo maldito" lo entendí. Esa película me sonaba. ¡Claro que me sonaba! Siendo pequeña la había visto y no volví a ver ninguna otra. Esa sopa de ojos de mono, y el batido de sesos de mono, y la serpiente que abren y salen serpientes pequeñitas....aaaagggghhhh!!! Me había repugnado tanto, que ni lo bueno que estaba en esa época Harrison Ford, ni las grandes aventuras contras nazis, pudieron convencerme.

Todavía siento algo de nauseas al ver esa escena de la cena, pero ahora puedo decir que Indiana y sus aventuras me ha gustado. Las tres están geniales.

Bueno, la tercera un poco más ñoña con el padre que no le ha dicho a Indiana todo lo que le tenía que decir, y luego Indiana llorando por él...pero aún así, con esos nazis en busca de la juventud eterna, es mortal!!

Ahora me siento una indiana yo. Me creo que puedo coger un látigo e ir colgándome por doquier con él, que puedo dar puñetazos y salir sin más, cabalgar mientras tanques me persiguen y al romperse un puente yo me agarro al pie y me salvo.

DECORACIÓN NAVIDEÑA

En un día como hoy se me viene a la cabeza los recuerdos de los momentos en los que decorábamos la casa llenando el salón de espumillón y el árbol de bolitas.

Me encantaba. Me encanta la navidad. La ciudad se ilumina y las tiendas las decoran con Olentzeros.

¡Ay no! Este año eso no pasará. La ciudad no se iluminará. El ayuntamiento ha decidido que no van a colgar ninguna bolita por la ciudad. La excusa de la crisis. La gente se está quejando, y creo, que con razón.

Cuando era pequeña me encantaba pasear por el centro, embutida en mi abrigo, con guantes y gorrito. Alucinaba con los miles de rayos de colores que iluminaban cada paso. Soñaba con los regalos que me traería el Olentzero, con las comidas y cenas familiares, y estaba ansiosa de que llegase el 5 de enero para ver las grandiosas carrozas.

Pienso en esos niños que no podrán soñar como yo. No podrán mirar el cielo y que este esté iluminado de lucecitas. Qué pena.

Y es que mi casa está igual de apagada. Pero no voy a dejar que se quede así, yo quiero soñar.